Cuando cocino me pongo delantal. El diseño de moda ha entrado en el atuendo de los cocineros, pero yo me niego a vestirme con traje de cocinero profesional. El delantal es ideal para cocinar en casa, deja libertad de movimientos y protege las partes del cuerpo más expuestas alas salpicaduras y roces.
Pero además me gusta el gesto de quitármelo cuando ya he terminado de cocinar, es lo que remata un menú o un plato.
Afortunadamente hay muchos blogs de cocina en la red, muchas recetas y formas distintas de cocinar, yo quiero con mis recetas transmitir además la historia que tienen detrás y como me han hecho sentir. ¡Espero conseguirlo!
Y ahora ya, con el delantal colgado en la despensa, me dispongo a comenzar esta aventura en la que intentaré que cocinar no sea sólo mezclar ingredientes
No hay comentarios:
Publicar un comentario