miércoles, 23 de noviembre de 2016

PATÉ DE BERENJENAS


Este retorno está siendo muy vegetariano, comenzamos con la crema de calabaza y continuamos con berenjenas. Además ha sido un buen año para esta verdura pues sé que se han recogido abundantes cosechas en los huertos. En todo caso ya sabéis que este producto se encuentra todo el año en los mercados; no hay excusa para no probar esta receta.
La primera vez que hice este plato fue siguiendo los pasos de Arzak. Recuerdo que fue durante alguna fiesta Navideña y la primera vez que lo presenté no tuvo demasiado éxito, circunstancia normal si tenemos en cuenta la cantidad ingente de suculenta comida a la que siempre nos enfrentamos en esas fechas. Ésto me permitió averiguar que el paté de berenjenas está más rico con reposo, así, en la siguiente comida  fue rotando sin parar por la mesa hasta que se acabó y la opinión resultó ser unánime: DELICIOSO. En las siguientes ocasiones, he ido simplificando y adaptando un poco los ingredientes y la elaboración sin que se haya producido un cambio sustancial en el resultado, sigue estando buenísimo. 
Es interesante que sepas que con una berenjena obtenemos una buena cantidad de paté, si cocinas para pocos comensales te durará unos días (aguanta bien en la nevera) y si es para muchos será un picoteo estupendo. Al final de la receta te daremos algunas ideas de presentación pero de momento vamos a ponernos el delantal y a cocinar

Ingredientes:
  • 1 Berenjena
  • 1 Tomate maduro pequeño
  • 1 Cebolleta
  • 1/2 Limón
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal y pimienta negra
  • Comino 

Elaboración:

Calienta el horno a 180º mientras lava y seca la berenjena y el tomate. Corta la primera por la mitad de tal forma que te queden 2 partes similares y haz en cada una unos cortes en la carne, respetando la piel, para que resulte más fácil vaciarlas después de asadas (fíjate en la foto). Salpimenta y pon una pizca de comino y unas gotas de aceite en cada mitad. Envuelve por separado cada una de ellas en papel de aluminio. 
Retira la primera capa de la cebolleta, parte por la mitad y reserva una de ellas. Salpimenta y pon unas gotas de aceite en la otra y envuélvela también en papel aluminio. 
Repite la operación con el tomate pero entero, sin partir.
Pon los envoltorios en una placa o fuente para horno y cuando alcance éste la temperatura, introduce y deja que se hagan durante 20 o 30 minutos el tomate y la cebolleta y de 40 a 50 la berenjena. Deja atemperar.
Mientras, pica finamente la otra mitad de la cebolleta y pon una sartén con 2 cucharadas de aceite al fuego. Pocha la cebolleta a fuego lento y durante este tiempo pela el tomate y trocéalo junto con la cebolleta puesto que ya estarán tibios. Incorpora a la sartén. Con una cuchara, extrae la carne de las berenjenas, trocéala y añade también.[Es muy importante que recojas todos los jugos que las verduras hayan soltado en los aluminios y los agregues junto con la carne]. Rocía con un chorrito de zumo de limón y deja a fuego muy lento durante 15 minutos. Retira y deja que entibie.
Pasa a un vaso batidor y tritura bien todo; prueba el punto de sal rectificando si fuera necesario. Sin dejar de batir incorpora poco a poco un chorro de aceite y monta bien hasta que quede bien ligado. Listo.
Puedes servirlo frío o templado.

Ideas de presentación
Tienes muchas posibilidades a la hora de presentar este paté, tanto en su base como en el acompañamiento.
Lo más sencillo es presentarlo en un recipiente para colocar en el centro de la mesa y acompañarlo con unas tostadas o unas galletas tipo crackers para untarlo, así  cada cual se pondrá a su gusto. Siempre es mejor esta opción que presentarlo ya untado en las tostadas pues, el pan se ablanda y no es agradable de comer.
Puedes servirlo también sobre volovanes o tartaletas mini, eso sí, dales un golpe de horno justo antes de comer, quedarán más crujientes. Para decorar elige entre rodajas finas de pepinillos encurtidos, anchoas, pimiento asado, sésamo tostado, unos piñones .... Cualquier otra idea que se te ocurra seguro que es buenísima.

A última hora se me ocurrió espolvorear un poquito de pimentón

martes, 15 de noviembre de 2016

CREMA DE CALABAZA con zumo de naranja

Ha pasado más de un año desde la última receta publicada. No es que me haya aburrido de compartir estas experiencias culinarias, no; simplemente otras obligaciones me han mantenido ocupada. Pero lo importante es que, como el otoño, estamos aquí otra vez con muchas ganas de seguir enredando en la cocina, preparando recetas tradicionales o probando cosas nuevas o mezclando un poco de cada una.Y eso es precisamente lo que vamos a hacer en este plato: darle un punto de innovación a una sencilla crema de calabaza.
Como podéis ver seguimos cocinando con los productos de temporada. La calabaza es un clásico del otoño junto con el membrillo, las granadas, manzanas y peras, los frutos secos .... Iremos trabajando con ellos mientras vemos como las hojas de los árboles van tornando de su gama de verdes a los amarillos y marrones hasta que muchas de ellas caen y pasan a formar parte de la alfombra que cubre los senderos; esa hojarasca que resulta tan placentero pisar porque a la vez que amortigua suavemente los pasos produce un sonido peculiar que a mí me resulta un poco inquietante. Tal vez sea por esa sensación de vacío que sientes cuando se acumulan tantas que parece que tu pie nunca llega a tocar tierra firme.

Dejemos ya los paseos por el monte y vayamos a la cocina

Ingredientes:
  • 300 gr. de calabaza
  • 300 gr. de zanahorias
  • 1 o 2 naranjas de zumo (dependiendo el tamaño y el zumo que consigas)
  • 1 vaso de caldo de verduras
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Sal, pimienta negra, comino y jengibre
  • 1 yogur natural


Preparación:
Pela las zanahorias y la calabaza y corta las primeras en rodajas y la segunda en dados.
En la olla calienta dos cucharadas de aceite y rehoga a fuego lento unos minutos (3 o 4). Agrega la mitad del caldo, una pizca de comino y otra de jengibre si es en polvo o ralla un poquito si fuera fresco. Tapa y cuando comience el vapor deja hervir 5 minutos. Si no tienes olla puedes hacerlo en una cazuela a fuego lento durante 40 minutos pero tendrás que poner más cantidad de caldo y vigilar para que no se seque. 
Cuando baje la presión tritura el contenido hasta que quede una crema espesa pero bien fina. Es muy importante que quede bien triturado. Sobre ella ralla la piel de la mitad de una naranja; exprímela e incorpora también el zumo. Continúa batiendo añadiendo el resto de caldo hasta obtener el espesor deseado, prueba el punto de sal y rectifica si es necesario y pon una pizca de pimienta negra molida.
Bate bien el yogur y pon en una salsera aparte para presentar en la mesa, así cada uno podrá servirse al gusto.
Sirve la crema bien caliente.
Puedes decorarla con unos costroncitos de pan frito o tostado, pipas de calabaza u otros frutos secos picados.

Consejo
Yo prefiero que cada uno se sirva el yogur al gusto porque la diferencia de sabor es considerable dependiendo de la acidez de  las naranjas. Cuando son muy ácidas es posible que no necesites poner yogur porque puede resultar excesivamente ácida y al contrario, si las naranjas son muy dulces necesitarás añadir más cantidad de yogur; piensa que los ingredientes principales del plato son bastante dulces.